El viaje de Chihiro ¿para niños o para adultos?
- Beatriz Luque
- 11 dic 2016
- 2 Min. de lectura


El viaje de Chihiro es la séptima película del director Hayao Miyazaki. Producida por los estudios Ghibli de Japón, representa una de las películas cumbre del director. Así, es el único largometraje anime ganador del Oscar a la mejor película de animación en 2002. Ha sido muy analizada en cuanto a su simbolismo. Miyazaki es experto en contar una historia que esconde en su relato algo mucho más grande. Hay quienes entienden esta película como el paso de la niñez a la edad adulta, hay otros que hablan del amor y el odio, otros que hablan de la esperanza, de la lucha interna... y todos tienen algo de razón. Todos se pueden aplicar a la historia de Chihiro.
Y también, escondido en el viaje de la niña protagonista, se halla una crítica a la sociedad de consumo, no sólo la japonesa, sino la mundial. Primero, los padres de Chihiro se convierten en cerdos al comer sin parar, al consumir sin preguntarse si quiera de dónde viene toda esa comida. Después, Chihiro tiene que ingeniárselas para encontrar trabajo en la casa de baños termales dirigida por Yubaba.

Los bichos del carbón que se encuentra Chihiro la primera vez que pregunta por un trabajo a Kamajii, el viejo de las calderas, representan a todos aquellos trabajadores de fábricas industriales que producen en cadena, sin parar. La bruja Yubaba representa al dueño de una fábrica, lucrándose a costa del trabajo de sus empleados, pero sin repartir equitativamente las ganancias. Representa el egoísmo, el ego, la avaricia... Cambia el nombre de sus trabajadores por otro elegido por ella, como si fuera el número de serie de todos ellos, despojándoles de su humanidad para que sólo sean máquinas de producir.
Yubaba a Chihiro: "Ya tengo a todos los inútiles que necesito trabajando"

Sin Cara representa a todo ser humano que se deja llevar por la sociedad de consumo y pierde todos los valores humanos. Así, una vez que entra en el epicentro del consumo, se convierte en un bicho que se traga todo lo que puede, adoptando el carácter de lo que ingiere. Así, Chihiro dice en un momento de la película: "Sólo es malo cuando está dentro del balneario".
Lin representa el tipo de trabajadora que quiere dejar su puesto, que tiene el sueño de llegar "al otro lado" pero que en el fondo sabe que nunca lo logrará. Ha perdida la identidad de la que Chihiro no quiere prescindir.
Por último, y no menos importante está Hoku. Chihiro le devuelve su identidad para que pueda salir de esa cadena de producción que le tiene esclavizado, mientras que él avisa a Chihiro de que puede convertirse en una trabajadora más, sin identidad y sin posibilidad de salir de allí (como le ocurre a él) "Si te roba el nombre jamás podrás regresar a casa. Yo ya no recuerdo el mío"


Comments